lunes, 30 de mayo de 2011


Primero fue el verbo. Luego la palabra.
Y el universo, por mandato, nació expectante.
La palabra trajo consigo lo bueno y lo malo.
Al tiempo       la desdicha y el agravio señorearon.
Entonces, la palabra dejó de ser.  Y nació el silencio.
Y el silencio trajo el abismo. Y el abismo, a modo de un hambriento agujero negro cósmico... tragó todo.

Primero fue el verbo. Luego la palabra…

Silvia Carmen Mendoza



No hay comentarios:

Publicar un comentario